Los cinco grupos armados ilegales de Colombia perdieron en 2020 más de 5000 combatientes por la ofensiva de las Fuerzas Armadas.
El comandante de las Fuerzas Militares, general Luis Fernando Navarro, ha indicado que la cifra incluye muertes en combates, capturas y deserciones de las disidencias de las FARC, del ELN, del Clan del Golfo, Los Caparros y Los Pelusos, todos vinculados con el narcotráfico y la minería ilegal.
En esta misma línea, el alto jefe militar ha precisado que las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, que se apartaron de un acuerdo de paz de 2016, perdieron más de 1000 hombres, en consecuencias de las operaciones de las Fuerzas Armadas del país sudamericano.