Trabajadores salieron a las calles de la ciudad de Panamá en medio de una coyuntura que amenaza con empeorar las ya deterioradas relaciones laborales.
Recordando a los mártires de Chicago en la conmemoración número 135 de la lucha que buscaba el establecimiento de una jornada laboral basada en 8 horas, trabajadores y trabajadoras panameñas marcharon en la capital del país.
La intención de reformar el régimen laboral planteada por el ex ministro de finanzas, Guillermo Chapman, con el supuesto objetivo de reactivar la economía, es identificada por sectores obreros como un ataque directo a los intereses de la sociedad en medio de “una crisis humanitaria sin precedentes” y que mantiene aproximadamente a 155 mil personas con contratos suspendidos.