Miles de activistas condenaron la brutalidad y los ataques del régimen criminal israelí contra los palestinos y expresaron su solidaridad con este pueblo.
Palestina ha vuelto a ser escenario de violentas agresiones israelíes desde hace varios días. La brutalidad israelí ha provocado protestas en varios países del mundo.
La nueva escalada de violencia ha dejado, hasta la fecha, decenas de muertos y centenares de heridos en todos los territorios ocupados. Este miércoles, las autoridades palestinas informaron la muerte de dos jóvenes en la Cisjordania ocupada a manos de los soldados israelíes durante las protestas en apoyo a la resistencia en Gaza ante los crímenes israelíes.
También muchos activistas en las ciudades estadounidenses de Washington, Nueva York, Portland y Los Ángeles, entre otras, salieron a las calles y consideraron a EE.UU. como “cómplice” de los crímenes cometidos contra los palestinos.
Los paquistaníes también salieron a las calles para condenar lo que llamaron “la peor escalada de violencia en años”. Los manifestantes aseguran que la cuestión de la sagrada Mezquita de Al-Aqsa en Al-Quds, es algo que incumbe a todo el mundo musulmán, sea árabe o no. También denunciaron los intentos de los israelíes para desalojar familias palestinas del barrio Sheij Yarrah de la misma ciudad.
Indonesia es otro país que condenó la brutalidad israelí. Portando banderas de Palestina, los manifestantes se congregaron frente a la embajada estadounidense en Yakarta, capital, y prometieron apoyar a los palestinos. La ministra de Asuntos Exteriores, Retno Marsudi, calificó de intolerables las acciones israelíes contra el pueblo palestino.
El ejército israelí publicó un informe sobre los ataques contra las posiciones del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) en Gaza, y prometió realizar más. A su vez, la Sala de Operaciones Conjuntas, que integran los brazos armados de HAMAS y Yihad Islámica Palestina, declararon que la operación denominada ‘Espada de Al-Quds’ continúará “para proteger al pueblo y los lugares sagrados” hasta que “el enemigo ponga fin a su agresión”.