A pesar de las llamadas internacionales, el régimen de Israel continúa destruyendo las aldeas beduinas de los palestinos en la Cisjordania ocupada.
Bajo el alegato de que son “ilegales”, el ejército israelí derribó tiendas de campaña beduinas en la aldea de Khirbet Hamsa, en la ocupada Cisjordania, lo que obligó a decenas de palestinos a desplazarse del lugar.
Un funcionario palestino en el valle del Jordán, quien está a cargo de monitorear las actividades de los colonos israelíes en la zona, denunció que Israel, con tales medidas, ha desplazado a decenas de niños durante años, algo que antes también fue rechazado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Además de las organizaciones internacionales, varios expertos en todo el mundo lamentan que Estados Unidos sea cómplice en los crímenes que comete Israel contra los palestinos.