Nuevas evidencias arrojan luz sobre el papel de EE.UU. y Colombia en el asesinato del presidente Haití, Jovenel Moise, baleado en su residencia en Puerto Príncipe.
Fueron detenidos más de 25 estadounidenses y colombianos, un cerebro del plan de nacionalidad haitiano-estadounidense, y por si fuera poco el Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono) admitió que algunos involucrados habían recibido entrenamiento en el territorio estadounidense.
A ver cómo la prensa se posiciona ante el evento.