Las autoridades mexicanas aseguran que han logrado el retorno a sus hogares de indígenas desplazados que habían enfrentado a un grupo de delincuencia en Chiapas.
Unas 3000 personas de comunidades indígenas de Chiapas, un estado sureño de México, se autodesplazaron ante el enfrentamiento de un grupo de autodefensa llamado “El Machete” y un grupo de la delincuencia organizada en el municipio de Pantelhó. A casi un mes del suceso, autoridades federales y estatales han logrado el retorno seguro a sus hogares.
El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha asegurado que no permitirán la ingobernabilidad en esta zona del país, por lo que elementos de la Guardia Nacional dan acompañamiento a las personas para que regresen a sus comunidades.
Activistas de la zona aseguran que el peligro es latente pues el conflicto en el municipio de Pantelhó aún no termina, pero tienen esperanzas de que las autoridades resguarden la zona.
Comunidades indígenas de Chiapas aún temen de enfrentamientos entre grupos armados, sin embargo, piden al gobierno federal les envíen un apoyo económico, ya que tras permanecer fuera de sus viviendas, perdieron ingresos.
De acuerdo a activistas, se calcula que sean unas 4000 personas las que resultaron afectadas al no poder trabajar y menos poder salir a comprar alimentos; comunidades que hasta la fecha han recibido poco apoyo y se ignora en qué situación se encuentran.