Colombia, un país ubicado en la zona noroccidental de América del Sur, arrancó este año del 2022 con la competencia política hacia las elecciones presidenciales.
Más de 38 millones de colombianos están convocados a las urnas, el 29 de mayo, para elegir a un nuevo mandatario, después de los turbulentos años del actual presidente Iván Duque, caracterizados por el aumento de los asesinatos de los líderes sociales y los exguerrilleros de las FARC, así como por el deterioro de los derechos humanos.
La corrupción, la pobreza, la precarización laboral, la falta de salud y educación, sumado a un pésimo manejo de la pandemia, han manchado aún más la imagen ya oscura de Duque ante su pueblo.
En la mayoría de los sondeos, el candidato de la coalición Pacto Histórico, Gustavo Petro, es el más opcionado para llegar a la presidencia de la República Colombiana y sentarse en la Casa de Nariño.
Aspirante ha cargado en reiteradas ocasiones contra Duque por amenazar la paz y agudizar aún más el conflicto armado colombiano. Gustavo Petro se ha comprometido a ganar con contundencia los venideros comicios de mayo, si no hay fraude y si las élites y los oligarcas colombianos e internacionales no atentan contra su vida.