Continúan las denuncias de abuso policial en Panamá, esta semana nuevos altercados vuelven a poner bajo el ojo de tormenta a los cuerpos de seguridad de Panamá.
A pesar del llamado desde Naciones Unidas (ONU) a garantizar el respeto a los derechos humanos durante las protestas en Panamá, las acusaciones de abusos por miembros de la fuerza pública se incrementan en el país centroamericano.
Las denuncias en contra de los cuerpos de seguridad van en todas las direcciones, desde miembros del Servicio Nacional de Frontera (Senafront) expulsando familias en comunidades alternativas, hasta agentes de la Policía Nacional infiltrados en medio de las protestas que han tenido lugar en las últimas semanas.
Desde el Movimiento Comunal Nacional Federico Britton llevaron el descontento a las inmediaciones del Ministerio de Seguridad el pasado 4 de marzo, tras un incidente que dejó a menores de edad con heridas en la comunidad de Valle Hermoso.
La preocupación aumenta cuando los movimientos sociales plantean el uso de este tipo de estrategias dentro de un marco que busca criminalizar la protesta social mediante arrestos o la intimidación de los manifestantes y temen que cuerpos de inteligencia norteamericana incidan en este ámbito, sobre todo tras el establecimiento del nuevo Centro Regional Aeronaval bajo la mirada del Comando Sur.
John Alonso, Ciudad de Panamá.