El independentista Partido Nacional Escocés (SNP) ha ganado este sábado las elecciones del Parlamento regional al lograr la mayoría absoluta de los escaños.
Según los resultados, el SPN, liderado por la primera ministra Nicola Sturgeon, ha conseguido 64 escaños, una victoria que le permitiría impulsar otro referéndum independentista, puesto que el Partido Verde, que también apoya la autodeterminación de Escocia, ha logrado ocho escaños.
Al respecto, Sturgeon ha advertido al primer ministro británico, Boris Johnson, cuyos compatriotas conservadores han conquistado el segundo lugar con 31 diputados, de cualquier intento para impedir la celebración de un nuevo referéndum de autodeterminación tras esta esperada victoria.
“No hay simplemente ninguna justificación democrática para que Boris Johnson, o quien sea, intente bloquear el derecho del pueblo escocés a elegir su propio futuro”, ha declarado la autoridad escocesa, reafirmando que el resultado expresa la voluntad del pueblo de Escocia.
Johnson, quien debe autorizar este referéndum, se opone firmemente a tal consulta y argumenta que más de la mitad de los escoceses habían votado por seguir en el Reino Unido en 2014, pues ha calificado la idea de una acción “irresponsable e imprudente” en medio de la pandemia del nuevo coronavirus. Esto mientras Sturgeon ha asegurado celebrar la votación una vez superada la crisis sanitaria.
Pese a que un 62 % de los escoceses votaron en el referéndum del Brexit a favor de permanecer en la UE, debido al resultado del país al completo —Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte— el Reino Unido abandonó el bloque en 2020. Sin embargo, buena parte de la población de Escocia desea la independencia y aspira a regresar al bloque comunitario si se constituye como Estado soberano fuera del Reino Unido.
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De todas formas, los escoceses siguen divididos sobre la celebración de otra votación que pueda poner fin a los 314 años de unión con los otros tres Estados que forman el Reino Unido.