Para entender parte del presente, hay que remontarse al pasado y hurgar en los antecedentes de quienes muchas veces pretenden ser voz de “buenas causas” en la actualidad.
El grupo terrorista Muyahidín Jalq, conocido también como MKO, fue fundado en la década de 1960 en Irán. Después del triunfo de la Revolución Islámica en 1979, sus miembros iniciaron una campaña de atentados y asesinatos de ciudadanos y funcionarios iraníes. Buscaban disolver el Ejército y ganar poder político en la nación.
Durante la guerra impuesta de Irak a Irán, sus miembros fueron armados y equipados por el régimen baasista iraquí para luchar contra el país persa. Según los registros, de los casi 17mil iraníes inocentes asesinados en ataques terroristas durante las últimas cuatro décadas, unos 12 mil han sido víctimas de los actos condenables del MKO.
Hoy, quien se presenta como su líder y conversa con políticos y funcionarios de Occidente es Maryam Rayavi. Hace tres décadas, en 1993, fue nombrada “presidenta electa” de lo que su agrupación denominó un “Irán libre” como lo expresaba su esposo, Masud Rayavi, el entonces cabecilla de los Muyahidín Jalq. El objetivo de Rayavi en ese momento era crear una marca feminista que ganara apoyo político en el Occidente entre los enemigos de Irán. Su esposo la envió a Francia para realizar dicha labor. Desde el 2018, Maryam Rajavi se encuentra en Albania, donde se halla la sede del grupo terrorista.
El MKO estuvo en la lista negra de organizaciones extremistas durante años; pero la Unión Europea (UE) le sacó en 2009 y EE.UU. 2012, bajo el argumento de que no han cometido atentados terroristas desde hace unos años, sin tener en cuenta su implicación desde 2010 en el asesinato de varios científicos iraníes.
Lo cierto es que el grupo terrorista realiza encuentros anuales, en donde son invitados funcionarios políticos y relacionados a sectores de poder y Gobierno de países como EE.UU., Francia y hasta Arabia Saudí.
Pero, entre 2016 y 2017, el diario estadounidense The Washington Times, en un análisis divulgado desveló que políticos y activistas de EE.UU. y otros países habían recibido dinero para expresar su apoyo a las posturas antiraníes del Muyahedin Jalq y asistir a sus conferencias anuales.
Este año, a pesar de la pandemia, una conferencia de esta agrupación se volvió a realizar, de manera online. Tuvo como sede la capital de Francia y entre sus asistentes tuvo al ex secretario de estado de EE.UU., Mike Pompeo, quien alentó a seguir utilizando las políticas de máxima presión de la era Trump contra la nación persa. También estuvo presente el premier de Eslovenia, país que hoy preside la UE.
Las interrogantes que surgen al paso son:
¿Por qué Occidente que se autodenomina defensor de los DD.HH., se reúne con terroristas para hablar sobre Irán?
¿Por qué Francia, que nunca deja de denunciar el “terrorismo”, permite que el MKO celebre su cumbre en París?
En esta edición de Detrás de la Razón por HispanTV, analizamos junto nuestros expertos en la materia, las reacciones de Irán sobre esta reunión de Occidente con el terrorismo que generó terribles consecuencias en la nación persa y los objetivos de dicho respaldo al MKO.
Por Danny Pérez Díaz
IG: @Dannyperezdiaztv