Si algo tienen estas elecciones parlamentarias llevadas a cabo en Irak, es que al elegir un nuevo parlamento, muchos ciudadanos iraquíes ponen sus esperanzas en que surjan una serie de reformas profundas que contribuyan a subsanar décadas de conflicto, guerra y mala gestión, así como que los diputados elegidos se comprometan con la soberanía y la integridad territorial del país.
De hecho, estos comicios fueron adelantados seis meses, como respuesta a un levantamiento popular en la capital Bagdad y algunas provincias del sur, a finales de 2019, que pedía reformas económicas, mejores servicios públicos y una lucha efectiva contra el desempleo y la corrupción.
Previo a la votación, analistas en el tema del país árabe preveían una abstención electoral récord, mientras que muchos participantes en las protestas de 2019 pretendían boicotear el proceso de votación. Para tener una idea de la magnitud de esta jornada, se trató de la primera desde la caída del exdictador iraquí Sadam Husein que se llevó a cabo sin un toque de queda, algo que para muchos refleja una mejora significativa de la situación de seguridad en Irak tras la derrota del grupo terrorista Daesh en 2017.
Y aunque parte de la prensa occidental amaneció este lunes resaltando en titulares una baja participación, lo cierto es que está previsto que los resultados oficiales sean dados a conocer en las próximas horas o días.
Por los momentos se sabe que con los resultados del 94% de los centros de votación, la participación en los comicios fue del 41%, que se traducen en poco más de 9 millones de votantes, según la Comisión Electoral de la nación árabe. Si contrastamos estos resultados con los comicios de 2018, en aquel entonces la participación fue del 44,52%.
Gran expectativa. Según las leyes de Irak, el ganador de la votación podrá elegir al próximo primer ministro del país, pero aún es poco probable que alguna de las coaliciones en competencia pueda obtener una mayoría clara, por lo que quizás se podría generar un largo proceso que involucre negociaciones para seleccionar un primer ministro de consenso y acordar un nuevo gobierno de coalición.
En esta edición de Detrás de la Razón por HispanTV, analizamos los desafíos de Irak tras estas elecciones parlamentarias. Acompáñenos.
Por Danny Pérez Díaz
IG: @Dannyperezdiaztv