No hay esperanzas de que el Gobierno colombiano, culpable de una preguerra civil, proteja y defienda a los indígenas desplazados, opina un analista.
Desde hace semanas, 800 miembros de comunidades indígenas se han tomado el Parque Nacional de Bogotá (capital colombiana), en demanda de atención del Gobierno Nacional ante los problemas que azotan el país, como inseguridad, violencia, desempleo, entre otros.
En una entrevista concedida este domingo a la cadena HispanTV, el politólogo Juan Carlos Espinal recuerda que Colombia ha estado en un proceso constante de guerra en los últimos 54 años, incluso es el país de América Latina y el Caribe que tiene más desplazados.
Asimismo, asegura que el problema del desplazamiento es el resultado de la negligencia ante los derechos plurinacionales, lo que se ha profundizado debido a la pandemia de coronavirus, causante de COVID-19.
Al ser preguntado sobre las medidas que debe tomar el Gobierno del presidente Iván Duque frente a estas cuestiones, ha insistido en que no hay otra opción que asumir la defensa y la preservación de los derechos de los indígenas, sectores sociales y los niños.
“El Estado colombiano no tiene otra opción que asumir la defensa y protección de estos niños y estos ciudadanos. Yo no tengo ninguna esperanza en que un Gobierno como el de Duque tenga la suficiente racionalidad como para comprender lo que está ocurriendo”, ha lamentado.
De igual manera, ha indicado que la Administración de Duque está en un proceso de preguerra civil, a su juicio, fruto de las políticas antisociales que el ultraderechista está generando en toda la región no solamente en Colombia. “Duque representa un elemento distorsionador y desestabilizador de esa región”, ha agregado.