En EE.UU. sucede un juicio que viene a complicar la crisis económica que vive. El juicio podría influir en la parte intangible de la estructura social, la percepción de bienestar y la confianza en la vida misma, la seguridad, la justicia, la alimentación y la salud, que todo es manejado por lo político.
¿De qué hablo? De como un ciudadano estadounidense está furioso o de acuerdo con el Gobierno y el entorno en el que vive, y ese es uno de los ingredientes que empujan hacia la estabilidad, la bonanza o una guerra civil.
Por eso es tan importante su análisis. Hablo del juicio al policía que enfrenta cargos por la muerte de George Floyd. Se llama Derek Chauvin y la sesión principal del juicio en su contra se atrasó un día debido a que el juez quiere analizar si agrega el cargo adicional de asesinato en tercer grado.
Este expolicía, que presionó con una de sus rodillas el cuello de George Floyd por casi nueve minutos, está acusado de asesinato en segundo grado y de homicidio involuntario.
Con la muerte de Floyd se revivieron y se reactualizaron todos los otros casos similares en EE.UU. Eric Garner, asfixiado en 2014 en Nueva York tras gritar 11 veces: “No puedo respirar”, símbolo del movimiento Black Lives Matter, en español: “Las Vidas Negras Importan”.