En Kabul, los residentes expresan su preocupación por las prolongadas dificultades económicas del país, ahora agravadas seriamente por los recientes cambios.
El aplazamiento de la formación de un nuevo gobierno en Afganistán tras la llegada de los talibanes al poder ha creado muchas preocupaciones entre el pueblo.
La incertidumbre reina en Afganistán, un país azotado por décadas de una supuesta guerra contra el terrorismo lanzada por EE.UU. y la OTAN, así como por los recientes y rápidos avances del grupo Talibán. Los residentes de Kabul, la capital, han expresado su preocupación sobre varios temas, ya que se sigue demorando la formación de un nuevo gobierno desde que los talibanes tomaron el control de Kabul el 15 de agosto.
El grupo Talibán anunció que uno de sus dirigentes, el Mulá Baradar, encabezará el nuevo gobierno del que, según ellos, la primera tarea puede ser evitar el colapso de la economía y luchar contra la sequía y los estragos de una guerra de 20 años. Los mismos temas demandados por la gente.