La situación de la violencia sexual contra los niños en los Estados Unidos es terrible.
Según las estadísticas que ofrece el Departamento Federal de Salud y Servicios humanos, como media, cada ocho minutos, los servicios de protección a menores detectan evidencias definitivas que demuestran que un niño ha sido víctima de abusos sexuales.
¿De dónde provienen estas terribles estadísticas?
¿Acaso los medios de comunicación y de entretenimiento visual desempeñan un papel importante a la hora de romper los tabúes sobre las violaciones en los Estados Unidos?